30
junio 2012
Ciudad
del Rock, Arganda del Rey, Madrid.
Asistencia:
42.000 personas.
Rock
in Río repite su presencia en España cada dos años es uno de los
festivales donde más se piensa en la gente y su comodidad, muchos
puestos de comida, WC suficientes, césped artificial, noria,
tirolina, vías de acceso, parking amplio, transporte gratuito,
fuentes de agua, un gran y moderno escenario (80m*22m), sonido de
calidad, gente guapa y con una apuesta en extremo variada, rock, pop,
electrónica, etc., y este año quizás con un cartel algo más flojo
que en versiones anteriores y con una gran apuesta por bandas
españolas.
Hemos
asistido a la fecha de arranque 30 de junio por la presencia de Lenny
Kravitz y Maná dos artistas a los cuales hemos ya visto su directo y
son garantía de un gran espectáculo, y siguiendo la finalidad de
este blog que no es solo dar nuestras impresiones del concierto sino
también aquella información que pueda ser de utilidad para los que
se acerquen en las próximas fechas o en futuras ediciones.
Teníamos
planteado pasar todo el fin de semana en Madrid, uno por el festival
y segundo para disfrutar de la final de la Eurocopa en una ciudad con
mejor ambiente para los que nos gusta disfrutar de estos eventos
trascendentales, pero también con la precaución de que ese mismo
día 30 era la fiesta del orgullo gay por lo que ya presentíamos
como se iba a poner Madrid es por ello que decidimos quedarnos en
Torrejón de Ardoz (hotel+desayuno+parking) 55€ precio bastante
solidario y a 35 minutos de la Ciudad del Rock y sin la molestia de
los atascos sobretodo pensando en el regreso y cogiendo la vía por
Loeches.
No
teníamos ningún apuro por llegar ya que solo tenemos interés en
Macaco, Lenny y Maná y por supuesto pasearnos y dejarnos ver por
toda la amplia zona de la ciudad del rock.
El
primer punto es el acceso al parking, utilizando nuestro coche
habíamos comprado el ticket+pegatina en el Corte Inglés (20€)
días antes y es increíble que aún habiendo mucha información al
respecto la gente llegue al parking con el ticket pero sin la
pegatina, o bien a comprarlo allá mismo (tarjeta o efectivo) con las
consecuencias de las colas y retrasos, los que veníamos ya con la
pegatina y el ticket pues por una vía directa al parking, siendo
efectivamente organizado por el personal del festival.
Ya
una vez dentro pues a dar un paseo por la zona mientras al fondo
suena La Oreja de Van Gogh, nos da tiempo para comer, ver
merchandising y ubicarnos cómodamente en el césped artificial,
mientras arranca Macaco.
El
de Barcelona que ha estado en la edición 2010, tiene una banda
multicultural con canciones para animar y bailar, Moving, Con la mano
levantá, Monkey Man y su mas reciente y pegadísima Love is the only
way.
Termina
Macaco y esperamos poco tiempo para ver a Lenny Kravitz con su montón
de éxitos con lo cual es difícil predecir un setlist, pero
suponemos por lo menos dos o tres temas de su último álbum Black
and White America, Stand, rock
star city life, Where are we runnin’, vibrante puesta
en escena, sonido potente y de alta calidad, un Lenny soportado por
unos músicos de primera línea donde siempre resalta una figura
femenina, en otros tiempos la batería con Cindy Blackman, ahora en
ese instrumento el exquisito de Franklin Vaderbilt quien le pone un
toque de “sabor” y ya nos había gustado muchísimo en la gira
LLR(20)(09), esta vez la figura femenina en la persona de la bajista
Gail Ann Dorsey quien regresaba a la banda. Me gusta una banda donde
la batería y el bajo no son solo instrumentos de acompañamiento
sino que son protagonistas, muchos de los temas de Lenny tienen unas
líneas de bajo impresionantes; por supuesto su siempre guitarrista
Craig Ross quien se lanzó un gran solo en Believe. Rock and roll
puro con riffs pegadizos, funky, soul y hasta un toque de jazz dieron
a una bella noche una gran carga de música, paseándose también por
sus otros singles, always on the run, Mr. Cab driver, are U gonna go
my way, fly away, believe, fields of joy, american woman, let love
rule sin que la gente se supiera muy bien el coro, con el cual cerró
su concierto de una hora exacta sin más, dejándonos con la
sensación de que fue poco.
Descubrí
a Maná por allá en 1987 motivo de una hospitalización de varios
días y en el que en mi obligado encierro dispuse a escuchar mucho
rock latinoamericano. Esta banda mexicana me impresionó gratamente
por su fórmula de mezclar temas en español, con un sentido y
rítmica anglosajona, apoyados con un baterista de una habilidad y
carisma excepcional, desde allí he seguido a esta banda y aunque en
muchos de sus discos sus temas han sido muy del mainstream
notablemente influenciados por su contrato con la discográfica que
seguro presiona hacia una imagen y sonido mas comercial dirigido a un
público con el cual poco me identifico pero que en ningún caso
significa una merma de calidad en sus producciones.
Ya
de vuelta nos vamos muy contentos por haber disfrutado este Rock in
Río.
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